En un importante evento que resalta el compromiso con la educación en las zonas rurales, la Institución Educativa Nuestra Señora del Pilar, ubicada en la vereda La Piedra, celebró la ceremonia de posesión de sus nuevos líderes estudiantiles. 

Este acto, no solo pone de manifiesto la vitalidad de la comunidad, sino que también subraya el papel singular que juega la institución como el único establecimiento educativo del municipio, sirviendo como epicentro de formación y desarrollo para los jóvenes de la región.

La ceremonia contó con la presencia del alcalde, David Esteban Franco Vallejo y del Subsecretario de Educación, Edison Jaramillo, quienes respaldaron la investidura de Anderson Gil como Personero y de María Angélica Arbeláez como Contralora estudiantil. 

Carolina Calderón, destacada docente de ciencias sociales, remarcó la relevancia de reconocer y apoyar a los representantes estudiantiles, quienes jugarán un papel crucial en la defensa de los derechos de los estudiantes y en la gestión transparente de los recursos financieros de la institución.

"Es fundamental que nuestra comunidad educativa, especialmente en zonas rurales como La Piedra, cuente con representantes comprometidos y conscientes de sus responsabilidades". Este evento no solo destaca por su significado en la promoción de la participación estudiantil, sino también por reforzar el lazo entre la educación y el desarrollo comunitario rural.

La personería y contraloría estudiantil asumen un rol indispensable en la vida escolar, garantizando una gestión eficaz y democrática de las iniciativas y recursos. Mientras Anderson Gil se enfocará en velar por los derechos de los estudiantes durante el 2024, María Angélica Arbeláez, con un mandato de dos años, tendrá la misión de supervisar la adecuada inversión de los fondos educativos.

Este acto no solo simboliza la fe en los jóvenes líderes, sino que también reafirma el compromiso de la institución con ofrecer una educación de calidad y promover valores de liderazgo y participación ciudadana entre sus estudiantes, esenciales para el crecimiento y bienestar de las comunidades rurales.